Todo ocurrió del 17 al 23 de julio, en la ciudad de León. Ciudad que acogió a siete magníficos jóvenes: Lucía de Oviedo, Diego de Tui, Borja y Hugo de Burgos, Sandra y Andrea de Salamanca y Lore-na de un lugar entre Burgos y Salamanca; junto a ellos el H. Fito y Mariajo como acompañantes durante esos días.
El colegio San José acogió la vida en comunidad de este grupo y la Asociación Leonesa de Caridad, la Fundación Juan Soñador y Ker Saorengo los lugares que nos acogieron para acercarnos a otras realidades, entregar un poquito de nosotros y, sobre todo, recibir mucho más.
En la Asociación Leonesa de Caridad realizamos servicio de voluntariado en el comedor social junto a las Hijas de la Caridad y muchos otros voluntarios que dedican su tiempo a personas de la calle y sin recursos.
En la Fundación Juan Soñador atendimos a niños y jóvenes de diferentes realidades sociales que participaban de un campamento urbano.
Y en Ker Saorengo llevamos a cabo otro campamento urbano con niños y niñas de etnia gitana.
En definitiva tres experiencias diferentes que nos han acercado a unas realidades que tienen mucho en común, necesidades básicas que no se cubren: comida, cariño, ternura, socializar, jugar… Sentirse personas.
Nuestra vida en familia estuvo marcada por las comidas, cenas, sobremesas, amaneceres, juegos de cartas, tiempo de piscina, de excursión, los paseos nocturnos por León, las risas, el compartir, la complicidad, la escucha y la empatía.
Siete días, siete jóvenes, tres experiencias y dos acompañantes que han provocado una experiencia intensa e inolvidable.
Echa un vistazo a las fotos del campamento aquí.