Creemos en la capacidad de la persona para salir de sí misma y estar abierta al encuentro, en una dinámica de Alteridad-Fraternidad. Buscamos que cada joven se sienta capaz de relacionarse y participar en el grupo, desplegar habilidades sociales básicas, comunicar adecuadamente y empatizar con los otros. Favorecemos un ambiente en el que todos puedan aprender a gestionar los conflictos, a dejarse confrontar por los demás, a acercarse a los distintos y distantes y a tejer relaciones de intimidad. Intentamos que las relaciones se perciban como lugar de crecimiento, libertad e interdependencia.